Osoro pide respetar el "principio de no devolución" con los visados humanitarios

El arzobispo de Madrid, el cardenal Carlos Osoro, ha pedido a los estados miembros de la ONU que "garanticen el pleno respeto del principio de no devolución" de inmigrantes con medidas como los visados "por razones humanitarias como el que acaba de conceder el Gobierno" a los procedentes del buque 'Aquarius'.

Así se ha pronunciado durante su discurso en la presentación del Global Compact sobre Migrantes, una conferencia a la que también han asistido el presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, y la alcaldesa de la ciudad, Manuela Carmena.

Osoro ha dicho que la migración "debería ser segura, legal y ordenada", por lo que cree que los estados deberían "prohibir cualquier forma de expulsión arbitraria y colectiva".

"Es necesario respetar el principio de no devolución. Los estados deben evitar elaborar listas de países seguros, ya que a menudo tales listas no logran satisfacer las necesidades reales de protección del refugiado", ha manifestado.

Sobre España, ha comentado que "sería deseable revisar la práctica de las expulsiones sumarias y su cobertura legal", "apoyados en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos".

"Igualmente, los estados miembros de la ONU y otros actores implicados deberían ampliar el número y las formas de vías jurídicas alternativas para una migración y un reasentamiento seguro y voluntario, que garanticen el pleno respeto del principio de no devolución", ha apuntado.

En este punto, ha puesto como ejemplo los visados "por razones humanitarias como el que acaba de conceder el Gobierno de la Nación a los acogidos en Valencia" procedentes del buque 'Aquarius' y los visados de estudio, entre otros casos.

Los 630 inmigrantes que desembarcaron el pasado domingo en Valencia procedentes del 'Aquarius' tras ser rescatados de aguas libias dispondrán de un permiso extra de 45 días de estancia en España, tras el cual tendrá que regularizar su situación.

Osoro también ha instado a "adoptar programas de corredores humanitarios para las personas que viven en situaciones particularmente vulnerables y a "políticas de reasentamiento para refugiados y ser responsables con los cupos acordados y comprometidos".

Asimismo, ha solicitado "habilitar espacios de acogida responsable y digna de los llegados, acelerando la tramitación de los procedimientos de protección internacional".

El arzobispo de Madrid ha animado a los estados que tienen "importantes flujos migratorios de trabajadores" a informarles "de lo que suponen los procesos migratorios y custodiar sus derechos laborales en toda circunstancia".

"En particular, se les debe proteger contra la explotación, el trabajo forzoso y la trata de seres humanos, evitando la confiscación de documentos y pasaportes por parte de empleadores, facilitándoles el acceso a justicia gratuita", ha declarado.

Entre otras "buenas prácticas" ha mencionado "conceder a los refugiados y a los solicitantes de asilo la libertad de circulación y permisos de trabajo", "favorecer políticas que permitan la creación de negocios y empresas", "el acceso a los teléfonos móviles e Internet" y "oportunidades de empleo en sus países de origen en el caso de regreso".