Agustín Juárez deja la alcaldía de Collado Villalba

Agustín Juárez, ha comunicado este lunes en rueda de prensa que abandona la alcaldía de Collado Villalba. Una semana después de su detención en el marco de la Operación Púnica, el regidor ha tomado esta decisión subrayando que es "absolutamente inocente".

Juárez ha asegurado que "confía ciegamente" en la justicia y que ha tomado la decisión tras consultarlo con su familia y no por la presión de la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, que aseguró que de no dimitir, los populares presentarían una moción de censura en la localidad: "la gente que me conoce bien sabe que no acepto presiones de nadie". "No tengo ni la fuerza, ni la ilusión ni la dedicación para dar a los vecinos", ha aseverado.

Agustín Juárez ha reiterado que su intención es pasar la página de su vida política "que ha hecho mucho daño a la gente que me quiere". "Yo vivo en Villalba, mi hijo vive en Villalba y yo seguiré viviendo en Villalba como lo he hecho los últimos 25 años", ha afirmado.

"Ha sido un orgullo ser el alcalde de Collado Villalba en estos tiempos tan difíciles. No hay nadie más interesado que yo en la verdad". Juárez abandona también el acta de concejal.

Juárez no ha querido ofrecer detalles de los contratos que el Consistorio firmo con la empresa de eficiancia energética Cofely; algo que hará en los tribunales de los que espera que declaren su inociencia.

Juárez fue detenido al entender los investigadores que existen evidencias de que adjudicó el pasado mes de mayo un contrato a la empresa Cofely por 39 millones de euros destinado al mantenimiento de la instalación energética de los edificios municipales y de alumbrado público y a la mejora de la eficiencia energética del Ayuntamiento.

A cambio de adjudicar este contrato a Cofely, los miembros de la Corporación local implicados recibirían al menos de la multinacional francesa varios pagos de 70.000 euros, materializados en un sistema de facturas falsas entre empresas de Marjaliza y Cofely, según la investigación.

Tras su detención, el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco le tomó declaración el miércoles y le dejó en libertad bajo fianza de 40.000 euros, con la obligación de comparecer mensualmente en el juzgado.

Después de quedar libre, Agustín Juárez acudió al pleno del Ayuntamiento que se celebraba el pasado jueves, aunque sólo permaneció en él unos minutos, en los que recibió insultos y gritos reclamando su dimisión por parte del algunos vecinos presentes en la sala.

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