¿Qué ver y hacer en Alameda del Valle?

Alameda del Valle es un municipio y ciudad de la Comunidad de Madrid, España, situado en la región norte de Sierra Leona. Tiene 246 habitantes (INE 2021). Se encuentra en la zona nororiental de la comunidad de Madrid, más precisamente en la zona de la Sierra Norte, muy cerca del puerto de Malagosto.

Está situado en el alto valle del Lozoya, que comprende los municipios de Lozoya y Pinilla del Valle, comenzando en la vertiente sur de la Sierra de Guadarrama y finalizando en Los Altos de la vertiente norte de Hontanal.

La zona es rica en vegetación: árboles junto al río, chopos y fresnos, además de encinas, algunos olmos y espinos. El río Lozoya discurre por el municipio, por su margen izquierdo. A causa de la Sierra de Guadarrama, los musulmanes comenzaron a realizar múltiples saqueos en la ciudad en dirección a Segovia.

En el Libro de Buen Amor se menciona el puerto de Malagosto como punto de encuentro con la montaña, que durante siglos ha sido vía de comunicación entre el Valle del Lozoya y Segovia.

Forma parte de la Mancomunidad Segoviana de Ciudad y Campo de Segovia desde sus inicios. Perteneció a la provincia de Segovia hasta 1834 cuando se reorganizó. La ganadería siempre ha sido el mayor recurso económico de Alameda del Valle, exportando lana y pagando peaje por todos los rebaños que cruzan por allí.

La industria del lino se hizo cada vez más importante en el siglo XVIII. Hasta hace poco, la ciudad ha podido permanecer algo próspera debido a la calidad de los pastos, el riego y el desarrollo de los bosques de la ciudad, pero muchos tuvieron que emigrar de la ciudad cuando la ganadería y la agricultura perdieron poder económico.

Hoy en día, el turismo es una importante fuente de ingresos para Alameda del Valle, con los bosques de la zona y el embalse de Pinilla. Hoy te traemos los 4 lugares que no te debes perder en una escapada a Alameda del Valle:

Iglesia de Santa Marina

Está ubicada en la parte suroeste de la ciudad. Si sales de la ciudad, pasando la iglesia, llegarás al prado, un área no urbanizada. La construcción se inició en el siglo XVI en estilos gótico y renacentista. Las reformas tuvieron lugar en el siglo XVIII.

Núcleo urbano

Está muy fragmentado y no ha cambiado a lo largo de la historia, salvo algunos edificios de apartamentos y cabañas en los márgenes del núcleo. Incluso hay huertos en el centro de la ciudad, algo inusual, con plazas y callejones muy estrechos. Hay ejemplos de arquitectura de la región en toda la ciudad, incluidas casas, dependencias y estructuras de piedra de los siglos XVIII y XIX.

Casa consistorial

Construida a principios del siglo XX, tiene balcones a ambos lados y un reloj, lo más curioso es la torre del reloj de hierro forjado que se asienta sobre el edificio. Recientemente ha sido restaurado.

Ermita de Santa Ana

Situado en el Cerro de Santa Ana a las afueras de la ciudad, a unos 3 km del hotel, alberga un conjunto de edificios románicos de los siglos XI y XIII. En julio tiene lugar un desfile.

Fiestas a destacar

En la ciudad se celebra la Virgen de las Candelas el 2 de febrero, el Ayuntamiento invita a degustar platos como el jamón y bebidas como la limonada, y la patrona de la ciudad, Santa Marina, el 18 de julio.

La Fiesta de Santa Ana se celebra a finales de julio, con la procesión de la imagen de la Virgen desde la iglesia hasta la Ermita de Santa Ana, seguida de cenas, juegos infantiles, verbenas y bailes.

El 8 de septiembre, nacimiento de la Virgen María, con misa y procesiones, cocidos populares y otros actos festivos, suele trasladarse al fin de semana más cercano.